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Cuando las palabras no bastan en psicoterapia

En este artículo quiero hablar acerca del uso de símbolos en psicoterapia (a través de la expresión artística, y de el pensamiento metafórico).

Muchas veces sostenemos las mismas conversaciones, una y otra vez, con el mismo consultante, llegando a las mismas conclusiones, haciendo las mismas preguntas. A pesar de nuestras habilidades terapéuticas, y de la disposición de quien consulta. Hay momentos en los que las palabras nos llevan a un callejón sin salida.

La dificultad para contactar con el propio mundo afectivo, experiencias traumáticas difíciles de verbalizar, dificultades en la capacidad de abstracción, etc. Muchas pueden ser las causas.

El problema es que a veces transcurren varias sesiones así. En el peor de los panoramas eso termina en el abandono de la terapia, o, pero, en ver como, sesión tras sesión, el consultante relata el mismo sufrimiento, la misma intensidad, la misma estrategia de afrontamiento.

Cuando me doy cuenta de esto me detengo. Reflejo a mi consultante lo que observo. Y le propongo algo:

Hacer en vez de hablar. Pasarnos al lado del símbolo y de las metáforas.

¿Qué es esto? Puede ser desde la propuesta de pequeños ejercicios asociativos, o la invitación a dibujar, pintar o escoger imágenes relacionadas con lo que le pasa. Estas propuestas, en muchos casos, permiten otro tipo de diálogo. A veces volvemos a la palabra, con símbolos e ideas que enriquecen las posibilidades de dialogo. Otras veces damos un paso más allá, y transitamos hacia la expresión artística como via principal para la terapia.

Cualquiera de estas opciones resulta útil, y la elección que hagamos (siempre en conjunto con nuestro consultante), estará determinada por las necesidades particulares del proceso terapéutico en sí.

¿Por qué este modo de expresión y diálogo puede ser de utilidad?

En la historia de el arteterapia se han desarrollado (y siguen desarrollando) diversos planteamientos sobre la relación entre arte y terapia. Sobre el cómo el uso de símbolos en psicoterapia puede potenciar el tratamiento terapéutico. En torno a los beneficios para la salud de la expresión artística, los procesos psicológicos involucrados en ello, y sobre las formas de relación entre el terapeuta y el consultante en este espacio.

En un artículo sobre el poder sanador de la expresión artística, hablo de forma general sobre este tópico. Sin embargo, en este artículo tomaré un pequeño segmento dentro del mar teórico de las terapias expresivas:

El uso de símbolos en psicoterapia como la posibilidad de crear un nuevo orden

En psicoterapia, muchas veces el diálogo con el terapeuta permite al consultante aclarar y organizar los temas que trae a terapia. Para poder comunicarlo, necesita organizar frases, encontrar descriptores adecuados, etc.

Con la expresión artística para algo similar:

Organizamos diferentes elementos sensoriales (color, formas, texturas, trazos, etc.), en un conjunto coherente.

Así como las palabras que decimos representan nuestra visión de mundo, las imágenes que creamos también lo hacen. Y en el acto de crearlas, ponemos fuera fantasías, emociones, pensamientos, etc.

Creamos imágenes de nosotros mismos.

Lo interesante que tiene el uso de símbolos en psicoterapia, es que las metáforas pictóricas (y otras producciones artísticas), es que permiten pensar aspectos de mayor ambigüedad, multiplicidad de significados, e, incluso, dejar abierta su interpretación.

Esto permite ampliar la comprensión de lo que nos sucede, y poder integrar esta complejidad en nuestra visión de nosotros mismos

Por esto el arte permite conectar con nuestro mundo interno, mejorando el autoconocimiento.

Existen otros aspectos de la expresión artística en el espacio terapéutico que son importantes en arteterapia. En este artículo sólo enumeraré algunos, que luego podré desarrollar en otras publicaciones:

  • La particular relación entre el terapeuta, el consultante y la obra realizada.
  • La posibilidad de producir un objeto sensorial que concretiza la metáfora que se expresa
  • La posibilidad de poner fuera de sí aquello que se desea expresar, lo que genera una distancia emocional que ayuda en su análisis.
  • Etc.

Uso de símbolos en psicoterapia. Intervenciones:

Cuánto un consultante puede tolerar este nivel de incertidumbre, cuán cómodo se siente con realizar alguna actividad expresiva, es muy variable.

En algunos casos cambiamos al cien por ciento el estilo de las sesiones y nos dedicamos a crear imágenes con diferentes medios expresivos (pintura, dibujo, digitales, collage, etc.)

En otros casos incluimos ejercicios expresivos de este tipo dentro de sesiones en que la palabra sigue teniendo un rol importante

Y, en un porcentaje no menor de consultantes, partimos con pequeños ejercicios asociativos y expresivos para salir del callejón sin salida al que nos llevó la palabra.

Preguntas y propuestas para empezar

  • Si lo que sientes fuera un color (forma, textura, etc.), cual sería
  • Escoger de un repertorio de imágenes algunas que asocie con lo que estamos hablando
  • Pensar en una canción que de cuenta de los sentimientos que necesita expresar
  • Y otras.

Generalmente parto con estos pequeños ejercicios y propuestas, y si el consultante se siente cómodo y esta exploración abre caminos, entonces seguimos y la ampliamos.

Pero a veces bastan un par de asociaciones para desbloquear la conversación. Y está bien. Eso refuerza la idea de lo potentes que son las metáforas en la comprensión de sí mismo y el camino a la salud

Propuestas de ejercicios en este blog

Entre los artículos de este blog, existen varios en que propongo algunos ejercicios para utilizar en terapia. Aquí enumero algunos.

En terapia presencial

Y en el contexto de la terapia online:

Referencias:

1 comentario en «Cuando las palabras no bastan en psicoterapia»

  1. Pingback: 3 ideas para usar Pinterest en psicoterapia online - Paula Goñi

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